- Un análisis conjunto de la Agencia Internacional de la Energía (IEA) y la Oficina Europea de Patentes (OEP) desvela las tendencias de innovación relacionadas con toda la cadena de valor del hidrógeno; un elemento clave para el futuro de la transición energética en la Unión Europea.
- Según el informe, la UE está a la cabeza en cuanto a solicitudes de nuevas patentes relacionadas con hidrógeno (28 % del total en el periodo analizado) seguida de Japón (24 %) y de EE. UU. (20 %).
Madrid, 11 de enero de 2023 -. En los últimos años, el hidrógeno se ha convertido en el eje vertebrador de la política energética europea, principalmente por su capacidad de sustituir a los combustibles fósiles en sectores difícilmente descarbonizables. En este sentido, la Comisión ha inundado de posibilidades de financiación todo el entorno industrial relacionado con el hidrógeno, pero, ¿la disponibilidad de capital se ha traducido en acciones de innovación?
El análisis publicado ayer por la Agencia Internacional de la Energía en colaboración con la Oficina Europea de Patentes da pistas de que así es, aunque el período analizado (2010-2020) no tiene en cuenta la guerra de Ucrania y todos los mecanismos de financiación europeos derivados de la estrategia para reducir la dependencia de los combustibles fósiles rusos.
Foco en la producción de hidrógeno
Casi la mitad de las familias de patentes internacionales (FPI) en el lapso de tiempo estudiado están relacionadas con la producción de hidrógeno, y el resto se divide entre aplicaciones de uso final y las tecnologías de almacenamiento distribución y transformación del gas.
Según el análisis, Europa se sitúa como líder mundial en patentes de hidrógeno, en gran medida gracias a Alemania (11 % del total mundial) y Francia (6 %).
Japón, con un 24 % del total de patentes, se coloca segundo en esta clasificación, con una tasa de crecimiento en innovación de hidrógeno (6,2 %) que incluso supera a la de Europa (4,5 %) entre 2011 y 2020.
En tercer lugar se encuentra Estados Unidos (20 %), la única región donde la solicitud de patentes ha decrecido.
Liderazgo de la industria química
En el campo de las tecnologías de hidrógeno ya establecidas, el liderazgo en innovación es de la industria química europea, y la mayor parte de grandes patentes provienen de la industria del automóvil y la industria química en la búsqueda de soluciones para la descarbonización (electrólisis y pilas de combustible).
Las universidades y centros de investigación generaron el 13 % de todas las familias de patentes internacionales (FPI) con el foco puesto igualmente en la búsqueda de formas de producción limpia de hidrógeno. Este campo lo dominan centros europeos y coreanos.
Aunque en la actualidad la producción de hidrógeno está basada casi en su totalidad en los combustibles fósiles, en el campo de las patentes se observa un claro cambio de tendencia hacia formas de producción con bajas emisiones, lo que anticipa una futura explosión en el uso de electrolizadores. En este campo, Europa ha ganado ventaja por haber generado nueva capacidad de fabricación de este tipo de dispositivos, según destaca el informe de la IEA y la OEP.
Patentes en el sector de la automoción
Por otro lado, las patentes para el uso del hidrógeno en el en el sector de la automoción han crecido a un ritmo mucho mayor que para otras aplicaciones, a pesar de algunos avances recientes hacia la utilización del hidrógeno verde para la producción de acero. Sin embargo, la actividad innovadora aún no ha despegado de forma significativa en otras aplicaciones industriales, como el transporte de larga distancia.
Según el informe, para las start-up del sector del hidrógeno, presentar una solicitud de patente es clave a la hora de conseguir financiación posterior, ya que más del 80 % de la inversión externa en start-up va a empresas que tienen al menos una solicitud de patente en curso, un indicador de la importancia estratégica de las patentes para este tipo de entidades.
Existen grandes posibilidades de mejora
Por último, el estudio destaca que, aunque la tendencia general en cuanto al aumento de patentes relacionadas con el hidrógeno es positiva, aún existen áreas de mejora, ya que la fuerte interdependencia de las tecnologías de hidrógeno a lo largo de la cadena de valor significa que el uso generalizado del hidrógeno verde solo avanzará tan rápido como lo haga el eslabón más débil de la cadena.
“El hidrógeno verde puede desempeñar un papel importante en la transición hacia energías limpias, con potencial para sustituir a los combustibles fósiles en sectores en los que existen pocas alternativas factibles, como el transporte de larga distancia y la producción de fertilizantes”, explica Fatih Birol, Director Ejecutivo de la IEA, en la nota de prensa.
“Este estudio muestra que la actividad innovadora está dando respuesta a la necesidad de una cadena de suministro de hidrógeno competitiva, pero también identifica áreas —especialmente entre los usuarios finales— en las que se requiere un mayor esfuerzo”, concluye Birol.